Sé que te sonará por el anuncio de Ikea, pero yo lo sabía desde hace muchísimo tiempo.
Muchos caminos se cruzan, y este es un buen ejemplo; El dinero no da la felicidad.
Algunas de mis situaciones, por no decir la mayoría, son muchísimo peores que hace un año, e incluso que hace unos meses. Por ello, tal vez se debería estar peor, y lo hubiera estado, si no fuera por aquello que sucedió ese día 7 de febrero.
Tomé una de mis mejores desiciones, y jamás me arrepentiré de ello. Pongo la mano en el fuego.
Gracias a todos por haber estado conmigo antes de todo esto, ahora y para siempre. Había crecido con un significado erróneo en una de las palabras más importantes de mi vida, y ustedes saben cuál es. ^^
Por último decir, que ahora soy más feliz. ¿Sabeís la razón?
AHORA NECESITO MENOS ^^
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